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Cayo Coco

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Antonio Careses, CC BY 3.0 <https://creativecommons.org/licenses/by/3.0>, via Wikimedia Commons

En el norte del Municipio Morón, provincia de Ciego de Ávila, se encuentran cayos, islotes, islas y cayuelos que pertenecen al Archipiélago de Jardines del Rey. De belleza insólita, cautivadoras de mentes y corazones.

Ahí, en ese paraíso terrenal, donde el famoso escritor norteamericano y Premio Nobel de Literatura Ernest Hemingway pasaba jornadas de pescando en su tiempo de ocio o cazando submarinos alemanes durante la Segunda Guerra Mundial, donde siglos antes el pirata francés Jacques de Sores abandono a damas secuestradas después del ataque a Nuevitas, se localiza Cayo Coco con playas de finísimas arenas blancas como la nieve, aguas cristalinas poco profundas perfectas para disfrutar del sol y las playas.

Cayo Coco debe su nombre al Ibis Blanco o Ibis del Bosque, ave acuática de plumaje blanco muy común en el lugar a los que popularmente la población le llama Pájaro Coco. Tiene más de 27 km de playas.

La más conocida es Playa Larga, con sus 2,5 km de longitud que invitan a simple vista a disfrutar de un relajado baño tropical. La encantadora Playa Flamenco, que en numerosas ocasiones le ofrece al visitante la vista de preciosos flamencos rosados que se pasean en sus aguas tan poco profundas que a 200 metros de la línea de la costa se puede caminar, lo que la hace perfecta para familias con niños. También encontramos las aguas tranquilas color turquesa que nos ofrece Playa Las Coloradas, donde inofensivos habitantes del mar como peces, estrellas de mar y delfines nos ofrecen un espectáculo divertido e inolvidable en un ambiente natural.

Cayo Coco es un destino perfecto para el turismo de naturaleza, donde los fondos marinos destacan cuevas submarinas y exóticas barreras coralinas de más de 10 km de longitud, como atractivo entre 10 y 30 metros de profundidad donde prolifera la fauna marina multicolor. El cayo ofrece servicios de submarinismo, snorkelling en más de 20 sitios de inmersión, esperan al turista y paseos en catamarán, para quienes prefieren disfrutar de preciosos paisajes naturales.

La vegetación cubre el 90% de su territorio y el 77% es propiamente de bosques con más de 360 especies, varias de ellas endémicas. Al norte crecen matorrales xenomórfos costeros, al centro bosques de plantas de pequeñas hojas, que se han adaptado a la escasez de agua y al sur cubierto de manglares. Más de 200 especies animales encuentran refugio en el lugar, entre ellos aves, reptiles e incluso tres especies de quirópteros: el murciélago común, el frutero y el orejudo.

Varias lagunas interiores, que se erigen en hábitat ideal para diversas especies de la fauna, y con dos interesantes senderos: el de la duna de la Loma del Puerto y el de Las Dolinas.

A noroeste de Cayo Coco te espera unas 13 hectáreas de entorno natural bien conservado repletas de biodiversidad, llamada Parque Natural Bagá. Flamencos, tortugas, jutías, jicoteas, cocodrilos, peces y diversas especies de aves terrestres y acuáticas, muchas de ellas migratorias. Cayo Coco contribuye a la educación ambiental con salas de charlas, conferencias y exposiciones sobre la protección del mundo en que vivimos.

En el parque se puede visitar la réplica de una aldea aborigen y poder disfrutar de sus ritos, ver de la vida y costumbres campesinas de los cubanos durante toda la historia del país, pasear por una alameda colonial de los siglos XVII y XIX y sentirse parte de esa época. El visitante puede disfrutar de la cultura afrocubana, bailes y fiestas típicas de los avileños y conocer de cerca la historia de la piratería y admirar el Galeón Bucanero encallado, dentro del cual se puede disfrutar de una fría o un trago de ron en una taberna.

En el lugar se encuentra un restaurante, dos cafeterías de comidas ligeras, puntos móviles de ventas de bebidas y confituras, tiendas de souvenir donde se puede adquirir recreaciones artísticas y artesanías de especies de animales de la zona, réplicas de piezas de las culturas aborígenes y afrocubana, postales e imágenes del entorno, CD de música cubana, cantos de aves endémicas y otros objetos.

El visitante puede acceder al parque haciendo senderismo a pie o caballo y disfrutar de la flora, donde se destacan las poblaciones del árbol de bagá en su medio natural rodeadas de almácigos, uvilla, carey de costa, orquídeas, curujeyes y otros. Podrá disfrutar de un apasionante recorrido náutico en canoa aborigen por un canal cubierto de mangle rojo.

El lugar cuenta con un delfinario y un rocódromo moderno de 13 metros de altura para los amantes de escalar.

A Cayo Coco se puede arribar por una carretera de 27 km de largo, 17 de ellos por encima del mar, conocida como pedraplén o también por vía aérea, pues cuenta con su propio aeropuerto,“Aeropuerto Internacional de Cayo Coco”. 13 hoteles esperan al turista con una capacidad total de 5 641 habitaciones y se planea la construcción de otros 5 hoteles que contarán con 1525 habitaciones.

Cayo Coco, un verdadero paraíso terrenal, un recuerdo inolvidable para el visitante.

¡Animate!

Notas:

Rocódromo - construcción artificial para practicar la escalada deportiva; suele ser una pared vertical o con inclinaciones de superficie irregular para ofrecer al escalador puntos de agarre y apoyo.

Matorrales xenomórfos costeros - matorral de las costas y cercanías, con arbustos y árboles emergentes achaparrados, además de palmas de hasta 6 metros.

Fuentes:

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