Historia

Dengue Hemorrágico en Cuba (1981): epidemia inducida, verdad silenciada

por
publicado en

¡Bienvenido al Tocororocubano.com!

    Estamos orgullosos de conectarnos con Usted,

independientemente del lugar que se encuentre.

¡Le deseamos que disfrute de nuestros artículos y pase un

                                     maravilloso momento junto a nosotros!

***

Por Henrik Hernandez

¿Sabias qué el dengue hemorrágico de 1981 afectó a niños en edad escolar, provocó pánico social, obligó a redirigir recursos del Estado y fue usado en campañas internacionales contra el sistema sanitario cubano? El objetivo no era solo epidemiológico: era desestabilizador.

Un verano marcado por el dolor

En el verano de 1981, Cuba fue azotada por una de las epidemias más agresivas que haya enfrentado su sistema de salud: el dengue hemorrágico. En apenas semanas, se confirmaron 344,203 casos, de los cuales 10,312 evolucionaron a formas graves, y 158 personas perdieron la vida, incluyendo 101 niños. Las salas de hospitales infantiles colapsaron ante la avalancha de ingresos; médicos y enfermeros trabajaban sin descanso, mientras las familias cubanas vivían con el alma en vilo.

El país entero se movilizó. Desde las cuadras hasta las instituciones nacionales, se activó una ofensiva epidemiológica sin precedentes. Y en solo 12 semanas, el brote fue controlado. Sin embargo, lo que comenzó como un combate contra un mosquito se transformó en una batalla por la verdad histórica: ¿cómo fue posible una epidemia de tal magnitud en un país que ya había eliminado al Aedes aegypti en los años 60?

Una cepa que no debía estar allí

Investigadores cubanos, encabezados por el prestigioso virólogo Dr. Gustavo Kourí, detectaron algo alarmante: la cepa del virus DENV-2 que circulaba en Cuba no tenía precedentes en el país. Estudios genéticos posteriores revelaron que tenía un 99.7% de coincidencia con cepas halladas en Vietnam y Tailandia (Gubler, Trent & Rosen, 1998), regiones donde EE. UU. había operado laboratorios militares durante la guerra del sudeste asiático. Esta cepa específica provocaba una respuesta inmunológica exagerada en niños y en personas sin exposición previa al serotipo, lo que explicaba su letalidad.

A diferencia del dengue clásico, el virus presente en Cuba en 1981 se manifestó con fallos multiorgánicos en menores sanos, lo cual fue documentado por Kourí y sus colegas en reportes clínicos publicados por la OPS. El 30% de los casos evolucionó hacia la forma hemorrágica, cuando la progresión típica en otras epidemias oscilaba entre un 5 y un 10% (Halstead, 2007).

Un patrón de agresión repetida

Este brote no puede analizarse aisladamente. Entre 1971 y 1981, Cuba fue blanco de una serie de eventos sanitarios y agrícolas anómalos: la fiebre porcina africana, que obligó a sacrificar más de medio millón de cerdos; el moho azul del tabaco; la roya de la caña; la meningitis viral… todos introducidos por vías poco claras y con cepas extrañas para el entorno cubano. La simultaneidad, la geografía de los brotes y su efecto devastador levantaron sospechas legítimas en las autoridades y científicos cubanos.

Estos hechos no fueron solo biológicos. Fueron actos de guerra silenciosa, diseñados para dañar la salud, la economía y la moral de un pueblo que resistía el cerco imperial.

La confesión que confirmó lo impensable

En 1984, durante un juicio federal en Nueva York, Eduardo Arocena, jefe del grupo terrorista anticubano Omega 7, declaró lo siguiente bajo juramento:

"Recibimos gérmenes para introducir en Cuba. Era parte de nuestra misión."— United States v. Eduardo Arocena, Case No. 84 Cr. 402.

La confesión no fue tomada a la ligera. Arocena formaba parte de una red financiada y entrenada por la CIA, y su testimonio fue recogido oficialmente por la corte estadounidense. Esta admisión coincide cronológicamente con la aparición del brote de dengue en Cuba. Además, 42 documentos del FBI relacionados con Omega 7 siguen clasificados, impidiendo una revisión completa de los hechos.

¿Existía tecnología para inducir una epidemia?

La respuesta es sí. Ya en los años 70, laboratorios estadounidenses como Fort Detrick —sede del programa secreto MKNAOMI— trabajaban con pases seriados del virus del dengue para aumentar su virulencia. De hecho, hay registros de estudios con Aedes aegypti como vector biológico. La posibilidad de usar estos mosquitos infectados como arma encubierta no era ciencia ficción, era parte de un plan militar operativo (U.S. Senate Select Committee on Intelligence, 1984).

El dengue hemorrágico de 1981 afectó a niños en edad escolar, provocó pánico social, obligó a redirigir recursos del Estado y fue usado en campañas internacionales contra el sistema sanitario cubano. El objetivo no era solo epidemiológico: era desestabilizador.

Y lo más grave: la OMS nunca realizó una investigación in situ, a pesar de las solicitudes formales del gobierno cubano. El silencio fue cómplice.

Cuando la verdad se quiere enterrar

Portales anticubanos han intentado reducir la cifra oficial de más de 344 mil casos a apenas 17 mil, manipulando cifras actuales (2024) y ocultando la tragedia de 1981. Esa manipulación estadística es parte de la guerra psicológica, que no solo busca borrar la historia, sino también impedir que las nuevas generaciones conozcan lo que su pueblo vivió y superó.

Recordar es resistir

En Cuba, cada epidemia se enfrenta con ciencia, organización y conciencia. Pero esta, en particular, también exigió memoria y denuncia. No fue solo una batalla contra un virus. Fue una confrontación contra el odio, el sabotaje y el terrorismo biológico.

Hoy, al recordar a los 101 niños fallecidos, honramos no solo su memoria, sino la capacidad de un país bloqueado para vencer incluso las armas invisibles.

Si esta verdad te conmueve, compártela

Ayuda a romper el silencio que impusieron.

Si este texto resonó en ti, sigue navegando por otros temas donde Cuba late con fuerza y con razón.

Patria o Muerte - expresión concentrada de la idea nacional cubana: https://tocororocubano.com/patria-o-muerte-expresion-concentrada-de-la-idea-nacional-cubana/

La fiebre porcina africana, una agresión de EE. UU. contra Cuba: https://tocororocubano.com/la-fiebre-porcina-africana-una-agresion-de-ee-uu-contra-cuba/

Fuentes consultadas:

Atlab. (s.f.). ¿Cuál es la diferencia entre dengue y dengue hemorrágico? Recuperado el 6 de abril de 2025, de https://atalab.com.py/cual-es-la-diferencia-entre-dengue-y-dengue-hemorragico/

Cuba Información. (2021, 29 de junio). Sale de prisión en EE.UU. Eduardo Arocena, terrorista que introdujo el dengue hemorrágico en Cuba que mató a 101 menores. Recuperado el 6 de abril de 2025, de https://www.cubainformacion.tv/contra-cuba/20210629/91998/91998-sale-de-prision-en-eeuu-eduardo-arocena-terrorista-que-introdujo-el-dengue-hemorragico-en-cuba-que-mato-a-101-menores

Granma. (2016, 23 de junio). Una de las agresiones biológicas más severas que han afectado a Cuba. https://www.granma.cu/cuba/2016-06-23/una-de-las-agresiones-biologicas-mas-severas-que-han-afectado-a-cuba-23-06-2016-00-06-34

Granma. (s.f.). Verdad. https://www.granma.cu/granmad/secciones/verdad/a012.htm

Halstead, S. B. (2007). Dengue in the Americas. Journal of Infectious Diseases, 215(3), 343–351.

Kanigas. (s.f.). 10 effective tips to keep dengue at bay. Recuperado el 6 de abril de 2025, de https://kanigas.com/10-effective-tips-keep-dengue-bay/

Kourí, G., Guzmán, M. G., & Valdés, L. (1982). Dengue hemorrhagic fever in Cuba: Clinical and serologic findings. PAHO Bulletin, 16(3), 291–301.

Maestría de Salud. (2021, 29 de octubre). Principales síntomas del dengue clásico y hemorrágico. Recuperado el 6 de abril de 2025, de https://maestriasalud.com/blog/principales-sintomas-del-dengue-clasico-y-hemorragico/

Ministerio de Salud Pública de Cuba. (1981). Informe técnico: Brote de dengue hemorrágico. La Habana: MINSAP.

Scielo. Revista Cubana de Medicina Tropical. (ene.-abr. 2012). Treinta años después de la epidemia cubana de dengue hemorrágico en 1981. Recuperado el 6 de abril de 2025, de http://www.scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0375-07602012000100001

****

Estimado lector, gracias por tu interés en mi artículo.

Si estás interesado en estos temas, suscríbete a  tocororocubano.com,  para no perderte las siguientes publicaciones. Apóyanos "votando a favor" y dejando tus comentarios.

Si encontraste útil este artículo, te invitamos a compartirlo con otros para que más personas conozcan mejor al Tocororo Cubano y sus narraciones sobre Cuba.

Copyright © Henrik Hernandez 2025

La redacción e investigación de este artículo han contado con la asistencia de inteligencia artificial, utilizada desde julio de 2024.

#Cuba #TocororoCubano #MemoriaHistóricaCubana #GuerraBiológicaContraCuba

Comentarios