El zunzuncito 

Hace unos 40 o 42 millones de años la Isla de Cuba, o mejor dicho, un archipiélago de decenas de islas, se levantaban sobre la superficie marina en la región que hoy ocupa nuestra hermosa patria.

La flora comenzó a poblar sus territorios, quelonios llegaban a sus playas para depositar huevos y las aves procedentes de América del Norte y Centro América se aventuraban sobre las aguas marinas que las rodeaban y procedieron a la colonización. Aves de paso y aclimatadas poblaron la región. La vida se extendió por todos esos territorios, creando un inmenso paraíso terrenal.

Hoy los arqueólogos han encontrado y calificado al menos unas 24 especies de aves que durante esos millones de años poblaron nuestras tierras, surcando los cielos. Muchas eran predadoras gigantes, gavilanes (Titanohierax borrassi y el Gigantohierax suarezi), de hasta 110 cm de alto y lechuzas (Tyto noei y Tyto riveroi) estas últimas poseían alas de hasta 3 metros. Eso nos da la muestra de la fertilidad de la vida en aquellos tiempos y el maravilloso coto de caza para esas aves rapaces.

En la actualidad nuestra patria es compartida por 369 especies silvestres, 217 de ellas terrestres, 69 con relación directa con aguas dulces y 83 marinas. También nidifican 152 especies silvestres y de vida libre. De ellas, 9 llegaron con el hombre al Nuevo Mundo, 6 se han naturalizado y 3 aunque libres son dependientes del hombre.

Otras llegaron a América por vía natural desde el continente negro y finales del siglo XIX, al concluir la década de los 1870, se habían establecido todo el continente, incluido las Antillas, incluida nuestra tierra patria.
Por desgracia contamos con especies extintas como Vermivora bachmanii (bijirita de Bachman), que no se ha visto en Cuba desde 1964.

El 13,1% (28 especies) de las aves que tienen a Cuba como hábitat son endémicas, es decir que son únicas del país. También contamos con 20 subespecies que corresponden a 7 especies endémicas y 32 subespecies en correspondencia a 21 especies no endémicas. Por desgracia, 19 especies se encuentran calificadas como especies amenazadas, de ellas 13 (68,4%) integradas en el sistema de áreas protegidas.

Pero dentro de todas esa maravillas, hay una que fascina, el Mellisuga helenae, conocidos por todos nosotros como zunzuncito, perteneciente a la familia trochilidae del orden Apodiformes.

Es una verdadera máquina voladora. Capaz de volar hacia adelante, atrás, arriba, abajo e incluso de cabeza. Puede alcanzar hasta 114 km por hora de velocidad, elevarse hasta 15 000 pies de altura (unos 4,5 kilómetros), tomar el néctar de las flores en plenas suspensión aerodinámica batiendo sus alas entre 70 - 80 veces por segundo, utilizando su lengua roja oscura y largo, fino y negro pico que introduce dentro de las flores para alimentarse.

Puede permanecer suspendido en un mismo punto del espacio con una precisión impresionante, que ningún otro vertebrado puede igualar. Pueden batir sus alas hasta 200 veces por segundo al realizar el apareamiento. Su vuelo emite un zumbido similar a los de los insectos.

Sus patas le sirven para posarse sobre ramas y rascarse, pero no pueden saltar ni caminar. Sus huevos son diminutos. Anida entre febrero y septiembre, sus nidos son de unos 3 cm. Ponen 1 o 2 huevos. La madurez sexual la alcanzan entre los 2 meses y 1 año de vida. La hembra anida sola, sin la participación del macho y normalmente no utiliza el mismo nido, tienen son fieles a los mismos lugares. Alimentan sus crías al menos dos veces diariamente.

Se alimentan fundamentalmente del néctar de las flores, aunque pueden consumir pequeños insectos. Consume hasta la mitad de su peso en alimentos y 8 veces en agua durante una jornada.

Mide unos 5 cm desde la punta del pico hasta el límite de cola, con un peso medio de 1,8 gramos. Los machos son más pequeños y oscuros, por lo cual pueden ser confundidos con abejas. La cabeza y cuello del zunzuncito es de color rojo vivo, azul metálico en la espalda, ya las, blanco grisáceo en el pecho y el abdomen. La hembra tiene una coloración verde azulado con pecho y abdomen blanco y manchas blanquecinas en la cola.

Su ritmo cardíaco es el más rápido de todos los animales. Su corazón en reposo late entre 500 y 700 veces por minuto y activo de hasta 1200 latidos por minutos. Presenta las temperaturas más alta entre las aves, 40 °C, y la capacidad de economizar energía bajándola durante la noche hasta 19 °C o hasta la temperatura ambiente, rentabilizando los latidos cardíacos y sus riñones dejan de funcionar para evitar la muerte por deshidratación durante el ayuno nocturno.

El zunzuncito, el ave más pequeña del mundo,  es un gran polinizador, que corre el riesgo de desaparecer por la acción antropogénica y el cambio climático. Las leyes cubanas le confieren protección, pero no es suficiente, hay que restablecer los bosques del país

Notas:

Flora - conjunto de plantas de una zona o de un período geológico determinado.

Polinizador - son animales que se alimentan del néctar o polen de las flores y durante sus visitas transportan accidentalmente polen de una flor a otra, permitiendo la reproducción de las plantas y la producción de frutos.

Predador - que mata a otros de distinta especie para comérselos.

Quelonios - orden de reptiles con cuatro extremidades cortas, mandíbulas sin dientes y cuerpo protegido por un caparazón duro dentro del cual pueden retraer la cabeza, las extremidades y la cola.

Fuentes: 

• https://es.wikipedia.org/wiki/Anexo:Aves_de_Cuba#Origen_de_las_aves_de_Cuba
• https://www.youtube.com/watch?v=hR9vo5V5Wlc
• https://www.ecured.cu/Zunzuncito
• https://www.ecured.cu/Aves_end%C3%A9micas_de_Cuba
• https://es.wikipedia.org/wiki/Mellisuga_helenae
• https://www.diariodequeretaro.com.mx/doble-via/ecologia/sabias-que-el-corazon-del-colibri-late-mil-veces-por-minuto-4846215.html

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