El Bloqueo a Cuba: limitación a la soberanía de Estados Unidos

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Introducción

El Bloqueo: el obstáculo principal para Cuba, a pesar de las medidas recientes

Las recientes medidas anunciadas por la administración de Joe Biden hacia Cuba han sido recibidas con una mezcla de esperanza y cautela. Entre ellas destacan la exclusión de Cuba de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo y la remoción de ciertas empresas cubanas de listas de entidades sancionadas. Sin duda, son pasos positivos en un escenario de hostilidad histórica. Sin embargo, estas decisiones no abordan el núcleo del problema: el bloqueo comercial, económico y financiero impuesto por Estados Unidos desde hace más de seis décadas, que sigue siendo la mayor carga sobre la economía y el pueblo cubanos.

El impacto persistente del bloqueo

El bloqueo afecta todos los aspectos de la vida en Cuba, desde el acceso a alimentos y medicamentos hasta el desarrollo de tecnologías y el comercio internacional. Aunque las medidas recientes alivian ciertas restricciones, el impacto del bloqueo sobre la población cubana sigue siendo devastador. La prohibición de utilizar el dólar estadounidense en transacciones internacionales, por ejemplo, obliga a Cuba a realizar operaciones financieras más costosas y complicadas a través de terceros países. Además, la regulación que impide a empresas extranjeras comerciar con Cuba si sus productos contienen al menos un 10% de componentes estadounidenses, limita enormemente el acceso de la isla a bienes y tecnologías esenciales.

Estas restricciones, sumadas a las sanciones extraterritoriales, colocan a Cuba en una posición de desventaja única en el escenario global. Mientras que otros países enfrentan sanciones limitadas en tiempo y alcance, el bloqueo contra Cuba es amplio, prolongado y sistemático, afectando tanto al sector estatal como a la vida cotidiana de los ciudadanos.

El poder limitado del Presidente de EE. UU.

Es importante aclarar que un Presidente de los Estados Unidos no tiene la autoridad para derogar completamente el bloqueo, ya que este está codificado en leyes como la Ley Helms-Burton y la Ley Torricelli, cuya eliminación requiere la aprobación del Congreso. Sin embargo, el Presidente tiene la capacidad de flexibilizar ciertas medidas a través de decretos ejecutivos, como ya lo hizo Barack Obama durante su mandato.

Entre las acciones que el Presidente de EE. U. podría tomar están:

• Permitir que Cuba utilice el dólar estadounidense en sus transacciones internacionales, facilitando el comercio y reduciendo los costos de operación.
• Levantar la restricción del 10% de componentes estadounidenses, lo que permitiría a terceros países comerciar con Cuba sin temor a represalias.
• Ampliar las categorías de viajes autorizados de estadounidenses a Cuba, fomentando el turismo y los intercambios culturales.
• Facilitar el envío de remesas sin límites y sin restricciones.

Estas medidas no solo beneficiarían a Cuba, sino también a las empresas y ciudadanos estadounidenses interesados en establecer lazos económicos y culturales con la isla.

El bloqueo: un beneficio para sectores retrógrados en EE. UU.

Aunque el bloqueo se presenta como una herramienta de presión política, en la práctica solo beneficia a sectores retrógrados y extremistas dentro de la sociedad estadounidense, principalmente al denominado "exilio histórico" en el sur de Florida. Este grupo ha construido una industria basada en el odio, las mentiras y las manipulaciones contra Cuba, recibiendo financiamiento público y privado para perpetuar una narrativa anticubana. Esos sectores no están realmente interesados en un cambio de sistema en Cuba, todo lo contrario, pues significaría su "eutanasia política" y declive económico financiero. Su temor no solo radica en la posibilidad de un cambio político en la isla, sino también en la competencia económica que representaría una Cuba plenamente integrada al mercado mundial.

Sectores clave como el turismo, la biotecnología y la exportación de servicios profesionales podrían posicionar a Cuba como un actor relevante en el escenario internacional, lo que amenazaría los intereses de estos grupos que se han enriquecido gracias al aislamiento forzado de la isla. La oposición al levantamiento del bloqueo no responde a razones democráticas o de derechos humanos, sino a la defensa de privilegios económicos obtenidos a expensas del sufrimiento del pueblo cubano.

Un paso en la dirección correcta, pero insuficiente

La exclusión de Cuba de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo y la remoción de ciertas empresas de listas de sanciones son gestos que pueden facilitar un diálogo más abierto y constructivo entre ambos países. No obstante, mientras persista el bloqueo, las condiciones fundamentales que afectan al desarrollo de Cuba no cambiarán. La economía cubana seguirá enfrentando barreras artificiales que limitan su crecimiento, y el pueblo cubano seguirá sufriendo las consecuencias de una política que la mayoría de la comunidad internacional condena anualmente en las Naciones Unidas.

El levantamiento total del bloqueo es un reclamo histórico y necesario. Mientras tanto, las medidas que mitiguen los efectos más duros del bloqueo son un paso imprescindible para aliviar las dificultades de millones de cubanos y fomentar relaciones más normales entre ambos países.

Conclusión

Es hora de que Estados Unidos recobre su soberanía nacional, declarando su segunda independencia. Esta vez, no del poder inglés, sino de los grupos radicales que han secuestrado su política exterior hacia Cuba. Solo con una política basada en la cooperación y el respeto mutuo, podrá construirse un futuro más justo y equilibrado para ambas naciones.

Fuentes consultadas:

• Hernandez, H. (2025, enero 14). Cuba fuera de la lista de estados patrocinadores del terrorismo: Un giro en las relaciones bilaterales. Recuperado el 16 de enero de 2025, de https://tocororocubano.com/cuba-fuera-de-la-lista-de-estados-patrocinadores-del-terrorismo-un-giro-en-las-relaciones-bilaterales/
• Hernandez, H. (2025, enero 15). La necesidad de lanzar campañas de solidaridad contra la guerra mediática hacia Cuba. Recuperado el 16 de enero de 2025, de https://tocororocubano.com/la-necesidad-de-lanzar-campanas-de-solidaridad-contra-la-guerra-mediatica-hacia-cuba/
• Hernandez, H. (2025, enero 15). Un problema de seguridad nacional para EE. UU.: El financiamiento de grupos anticubanos. Recuperado el 16 de enero de 2025, de https://tocororocubano.com/un-problema-de-seguridad-nacional-para-ee-uu-el-financiamiento-de-grupos-anticubanos/

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