La Libreta de Abastecimiento en Cuba: pilar en tiempos de crisis y perspectivas futuras

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Introducción

La libreta de abastecimiento es uno de los mecanismos sociales más emblemáticos y debatidos en Cuba. Desde su implementación en 1962, ha sido el escudo para millones de cubanos frente a los efectos del bloqueo, la crisis económica y las fluctuaciones en el mercado internacional. Sin embargo, los debates sobre su vigencia, su alcance y la posibilidad de transformarla o eliminarla han ganado relevancia en los últimos años, especialmente en las difíciles condiciones de una economía asediada.

El papel actual de la libreta

La libreta garantiza una distribución mínima de productos básicos como arroz, azúcar, frijoles, aceite, huevos, café y proteínas ocasionales a precios subsidiados. Aunque no cubre todas las necesidades del mes, sigue siendo esencial para la seguridad alimentaria de los sectores más vulnerables. Su reducción progresiva, con productos ahora disponibles solo en mercados libres, ha provocado desigualdad, incentivado el mercado negro y exacerbado prácticas corruptas.

Productos fuera de la libreta como leche, carnes frescas, frutas, vegetales, productos de aseo y otros alimentos procesados han dejado a las familias más vulnerables con pocas alternativas, ya que los precios en tiendas en moneda libremente convertible (MLC) o mercados agropecuarios son inalcanzables para muchos.

Las consecuencias de una economía dual

Desigualdad social:

El acceso a productos esenciales está cada vez más ligado a la capacidad económica, creando una brecha entre quienes tienen ingresos en divisas o remesas y quienes no.

Mercado negro y corrupción:

La escasez en los mercados oficiales fomenta el desvío de productos hacia el mercado informal, donde los precios son especulativos. Muchos productos que deberían estar regulados terminan siendo revendidos de forma ilícita.

Presión psicológica y social:

Para muchas familias, la incertidumbre sobre qué podrán conseguir y a qué costo añade una carga emocional y social considerable, especialmente en un contexto de crisis.

La postura del gobierno

El gobierno cubano ha reafirmado que la libreta continuará operando en 2024. La ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez, destacó que no se eliminará en el corto plazo, y el primer ministro Manuel Marrero Cruz explicó que el sistema de subsidios generalizados será evaluado para dar paso a subsidios focalizados que beneficien a los más vulnerables.

Sin embargo, esta transición necesita tiempo, y en las actuales condiciones de una economía de guerra—con los efectos del bloqueo, la guerra mediática y las limitaciones internas—, la libreta debe fortalecerse, no reducirse.

Propuesta: reinsertar productos esenciales en la libreta

En lugar de continuar reduciendo su alcance, se sugiere reinsertar productos que antes eran distribuidos por la libreta y que actualmente se venden de forma libre o en MLC. Esto contribuiría a garantizar un nivel básico de seguridad alimentaria y equidad social. Los productos a considerar incluyen:

Leche en polvo: Especialmente para niños, ancianos y embarazadas, sectores que necesitan un acceso garantizado a este alimento.

Carnes frescas y embutidos: Proveer raciones regulares de pollo, cerdo o embutidos ayudaría a paliar las carencias proteicas.

Aceite de cocina: Aunque sigue en la libreta, su distribución es irregular; se necesita estabilidad en la oferta.

Productos de aseo personal: Jabón, pasta dental y detergente, que actualmente están mayoritariamente en el mercado libre o en MLC.

Frutas y vegetales básicos: Garantizar mínimas cantidades de viandas como plátano, boniato o yuca mediante la libreta podría aliviar la presión sobre los mercados agropecuarios.

Un enfoque renovado para la libreta

El fortalecimiento de la libreta requiere medidas complementarias para mejorar su eficiencia y sostenibilidad:

Digitalización: Implementar un sistema de tarjetas electrónicas que permita un control más riguroso y reduzca el desvío de productos.

Transparencia en la distribución: Garantizar que las cadenas de suministro sean monitoreadas para evitar corrupción y prácticas especulativas.

Incremento en la producción nacional: Aumentar la producción de alimentos y bienes básicos para reducir la dependencia de importaciones.

Conclusión

La libreta de abastecimiento es mucho más que un sistema de racionamiento; es un instrumento de protección social indispensable en las condiciones de una economía de guerra. Si bien es necesario evolucionar hacia subsidios focalizados y un mercado más equitativo, el contexto actual exige no solo mantener la libreta, sino también fortalecerla, ampliando su alcance para incluir productos esenciales que hoy se venden exclusivamente en mercados libres. Solo así se podrá garantizar que ningún cubano quede atrás, y que la solidaridad y la equidad sigan siendo principios rectores en la Cuba revolucionaria.

Notas:

La libreta de abastecimiento, implementada en Cuba en 1962, surgió como respuesta a la necesidad de garantizar la distribución equitativa de alimentos y productos básicos en un contexto marcado por el bloqueo económico impuesto por Estados Unidos y las limitaciones propias de una economía en transición al socialismo. Este sistema de racionamiento permitió a cada núcleo familiar adquirir productos esenciales a precios subsidiados, estableciendo un mecanismo de protección social que priorizaba el acceso universal frente a la escasez. Durante décadas, la libreta ha incluido artículos como arroz, azúcar, frijoles, aceite, huevos, café y en ocasiones carne, desempeñando un papel crucial en la seguridad alimentaria de la población cubana.

Con el paso del tiempo, el alcance de la libreta se ha reducido, reflejando los desafíos económicos que enfrenta el país y los intentos de ajustar el sistema a las realidades contemporáneas. Aunque ha sido objeto de críticas tanto internas como externas, se ha mantenido como un símbolo del compromiso del Estado con la equidad social. En la actualidad, sigue siendo un recurso vital para las familias más vulnerables, a pesar de que muchos productos anteriormente incluidos se venden ahora en mercados libres. La libreta no solo ha resistido los embates de las crisis, sino que también ha evolucionado como un testimonio del esfuerzo cubano por proteger a su población en medio de adversidades económicas y políticas.

Fuentes consultadas: 

• Escambray. Alsina, Xiomara. ¿Qué cambiará en la Libreta de Abastecimiento? (+fotos y video). Algunas adecuaciones en el documento benefician a los consumidores. Consulta 2024-11-29). https://www.escambray.cu/2023/que-cambiara-en-la-libreta-de-abastecimiento-fotos-y-video/
• Perla Visión. Canal de los Cienefuegueros. ACN. Mantendrán libreta de abastecimiento, asegura titular del Mincin. (Consulta 2024-11-29). https://www.perlavision.cu/mincin-libretaabastecimiento-cuba/
• Wikipedia. La Enciclopedia Libre. Racionamiento en Cuba. (Consulta 2024-11-29). https://es.wikipedia.org/wiki/Racionamiento_en_Cuba

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