Sociedad

Transacciones en divisas en Cuba: necesidad coyuntural y desafíos estructurales

por
publicado en
Imagen generada por la AI Sofia.

¡Bienvenido a Tocororocubano.com!

Estamos orgullosos de conectarnos con usted,

independientemente del lugar en el que se encuentre.Este no es un simple blog; es una Revista Digital Multidisciplinaria donde convergen el análisis geopolítico, la cultura, la economía, la naturaleza, el humor, y mucho más desde unaperspectiva cubana única. ¡Le deseamos que disfrute de nuestros artículos y pase un maravilloso momento junto a nosotros!

Por Henrik Hernandez - Tocororo Cubano

Introducción

La reciente aprobación del Decreto-Ley 113, que establece un nuevo mecanismo para la gestión, el control y la asignación de divisas en Cuba, marca un punto relevante en la política económica del país. La norma reconoce una realidad objetiva: en las condiciones actuales, la economía cubana no puede sostener su funcionamiento exclusivamente sobre el peso cubano sin un respaldo suficiente de ingresos en moneda extranjera.

Esta medida, lejos de ser improvisada, se inscribe en el Programa de Gobierno para corregir distorsiones y reimpulsar la economía, y responde a una restricción material concreta: la escasez crónica de divisas y la necesidad de ordenar un proceso de dolarización parcial que ya existía de facto en múltiples circuitos económicos.

Una medida objetivamente necesaria

Desde un punto de vista técnico, permitir transacciones en divisas dentro de un marco jurídico claro es una decisión comprensible. La economía cubana ya operaba parcialmente en moneda extranjera a través del comercio en MLC, las remesas, el turismo y determinados encadenamientos productivos. El Decreto-Ley 113 no crea ese fenómeno, sino que intenta regularlo, dotarlo de reglas explícitas y someterlo a control estatal.

Entre los beneficios inmediatos de esta decisión se encuentran la mayor previsibilidad para los actores económicos, la racionalización de la asignación de divisas y el estímulo a actividades estratégicas como la exportación y la sustitución de importaciones. Asimismo, la introducción de instrumentos como la Asignación de Capacidad de Acceso a Divisas (ACAD) corrige distorsiones previas al separar claramente la autorización de acceso a divisas del medio de pago, reforzando la disciplina financiera.

En este sentido, la medida puede contribuir a estabilizar parcialmente el funcionamiento macroeconómico y a crear condiciones para un futuro mercado cambiario más ordenado.

Los límites de una solución coyuntural

Sin embargo, reconocer la necesidad de esta política no implica ignorar sus límites. Las transacciones en divisas, por sí mismas, no resuelven los problemas estructurales de fondo de la economía cubana. La baja productividad, la debilidad de los encadenamientos nacionales, la dependencia del exterior y las distorsiones en los mecanismos de dirección económica no desaparecen por la sola introducción de divisas en determinados segmentos.

Además, si no se controlan adecuadamente, estas medidas pueden generar nuevas contradicciones. Entre ellas, la segmentación de la economía entre sectores con acceso estable a divisas y otros que permanecen atrapados en un entorno de CUP devaluado; la desigualdad territorial y empresarial; y la consolidación de intereses creados difíciles de revertir en el tiempo.

La experiencia histórica muestra que los mecanismos concebidos como “temporales” tienden a prolongarse cuando generan espacios de reproducción económica diferenciada, especialmente si no existen cláusulas claras de reversibilidad y evaluación periódica.

Subordinar la divisa a una estrategia socialista

El punto clave no es la existencia de transacciones en divisas, sino a qué lógica estratégica se subordinan. Desde una perspectiva socialista, la divisa no puede convertirse en un fin en sí mismo ni en una fuente autónoma de poder económico. Debe funcionar como un instrumento transitorio para reconstruir la base productiva nacional y fortalecer, a mediano plazo, el papel del peso cubano.

Para evitar desviaciones estructurales, el acceso a divisas debería concebirse como una concesión revocable, asociada a obligaciones productivas y sociales verificables: encadenamientos nacionales, reinversión local, contribución a bienes estratégicos y respaldo efectivo al sistema monetario nacional. Asimismo, parte de las divisas generadas debe canalizarse hacia la estabilización del CUP y la construcción de un mercado cambiario regulado que reduzca la brecha entre la economía formal y la informal.

En ausencia de estos mecanismos, la divisa corre el riesgo de convertirse en un factor de fragmentación económica más que en una palanca de desarrollo.

No es una traición al socialismo

Utilizar divisas en condiciones de bloqueo, asfixia financiera y crisis productiva no constituye una traición al socialismo. El socialismo no se define por la ausencia de moneda extranjera, sino por quién controla la dirección económica, cómo se distribuye el excedente y con qué fines sociales se emplean los recursos.

La verdadera disyuntiva no es entre divisa o no divisa, sino entre una economía en divisas subordinada al interés social y una economía en divisas que genere lógicas autónomas difíciles de controlar. La diferencia entre una y otra no es técnica, sino política y estructural.

Conclusión

Las transacciones en divisas pueden ser una herramienta necesaria en el corto plazo para ordenar la economía cubana y enfrentar restricciones externas severas. No obstante, su legitimidad y eficacia dependen de que estén claramente subordinadas a una estrategia de transformación estructural, con control, límites y objetivos definidos.

El desafío no es solo estabilizar la economía, sino evitar que las soluciones coyunturales se conviertan en nuevas fuentes de desigualdad y rigidez. Resolver esa tensión será decisivo para que estas medidas contribuyan, realmente, al fortalecimiento del proyecto social cubano y no a su fragmentación silenciosa.

Glosario de términos clave

ACAD (Asignación de Capacidad de Acceso a Divisas): Instrumento administrativo mediante el cual el Estado autoriza a determinados actores económicos a acceder a divisas, sin que dicha autorización constituya un medio de pago en sí mismo. Su objetivo es ordenar el acceso a monedas extranjeras para actividades priorizadas.

Bloqueo económico: Conjunto de sanciones comerciales, financieras y económicas impuestas por Estados Unidos contra Cuba, con efectos extraterritoriales, que limitan el acceso del país a mercados, financiamiento y divisas.

Convertibilidad monetaria: Capacidad de una moneda nacional para intercambiarse libremente por otras divisas en un mercado cambiario estable y regulado, respaldado por fundamentos macroeconómicos sólidos.

Divisas: Monedas extranjeras utilizadas en transacciones internacionales o internas autorizadas, cuyo acceso es crucial para economías dependientes del comercio exterior.

Dolarización de facto: Proceso no formal mediante el cual una economía comienza a operar parcial o informalmente en divisas extranjeras, aun cuando la moneda nacional siga siendo la de curso legal.

Economía dual o segmentada: Situación en la que coexisten circuitos económicos diferenciados, unos con acceso a divisas y otros que operan exclusivamente en moneda nacional, generando distorsiones productivas y sociales.

Estabilización macroeconómica: Conjunto de políticas orientadas a reducir desequilibrios fiscales, monetarios y cambiarios, con el fin de garantizar un funcionamiento más previsible de la economía.

Intereses creados: Estructuras económicas o actores que, al beneficiarse de un esquema específico, desarrollan capacidad de presión para mantenerlo, incluso cuando deja de ser funcional al interés general.

Peso cubano (CUP): Moneda nacional de Cuba, cuyo fortalecimiento y futura convertibilidad constituyen objetivos estratégicos declarados de la política económica.

Subordinación al interés social: Principio según el cual los mecanismos económicos —incluido el uso de divisas— deben estar orientados a la reproducción de la economía social y al bienestar colectivo, y no a la acumulación autónoma de poder económico.

Fuentes consultadas

Reyes Rodríguez, D. (2025, 11 de diciembre). Transacciones en divisas: un camino necesario para robustecer la economía nacional. https://www.granma.cu/cuba/2025-12-11/transacciones-en-divisas-un-camino-necesario-para-robustecer-la-economia-nacional-11-12-2025-07-12-45

Paredes López, A. (2025, 13 de diciembre). En el XI Pleno del Comité Central estará la agenda de Cuba. Presidencia de la República de Cuba. https://www.presidencia.gob.cu/es/noticias/en-el-xi-pleno-del-comite-central-estara-la-agenda-de-cuba

Razones de Cuba. (2025, 11 de diciembre). ¿Qué necesitas saber sobre el Decreto-Ley No. 113 o Ley “Sobre las transacciones en divisas en la economía nacional”? https://razonesdecuba.cu/que-necesitas-saber-sobre-el-decreto-ley-no-113-o-ley-sobre-las-transacciones-en-divisas-en-la-economia-nacional/

Gracias por leerme.
Si este contenido resonó contigo, únete a nuestra comunidad comentando y compartiendo.

© Henrik Hernandez, 2025. Bajo protección de la Ley Sueca de Derechos de Autor (Upphovsrättslagen, 1960:729). Todos los derechos reservados. Queda prohibida la reproducción total o parcial sin autorización. 

Declaración de autoría

Formación multidisciplinaria:

Geopolítica y Ciencias Sociales: Licenciado en Ciencias Pedagógicas con especialización en Historia y Ciencias Sociales por la Escuela Superior Interarmas de Políticos Militares de Minsk (1986)

Economía y mercados: Graduado de Vendedor y Promotor de Comercio Internacional en Säljehögskola - Mercuri International (2001)

Psicología y Salud: Auxiliar de Enfermería en Lärgården (2010) con especialización en Psiquiatría (2025)

Método de trabajo:
Artículo investigado, argumentado y redactado íntegramente por el autor. Se empleó IA exclusivamente para estructuración editorial y contraste conceptual bajo supervisión humana constante.

#TocororoCubano #EconomíaCubana #Divisas #SocialismoCubano #EstabilizaciónMacroeconómica #PesoCubano #PolíticaEconómica #Bloqueo #EconomíaPolítica

Comentarios