Naturaleza

También lucharon por la Patria

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El 2 de septiembre de 2020 le envié una comunicación al entonces Cónsul de Cuba en Suecia, Víctor Manuel García Sánchez, con la petición de que se le diera curso ante las autoridades cubanas. Por desgracia, mi proposición no tuvo respuesta de ningún tipo, ni positiva, ni negativa.

La proposición decía lo siguiente:

”Muchos pueblos tienen símbolos totémicos que significan la relación espiritual de un pueblo determinada con su propia naturaleza y la naturaleza que lo circunda.
Hasta donde tengo conocimiento, los cubanos tenemos símbolos nacionales pero no totémicos.
Propongo que la Avispa sea nuestro símbolo totémico como pueblo y nación.
La Avispa ha tenido un gran rol en nuestras luchas independentistas y hoy forma parte del logotipo de nuestras tropas especiales.
La Avispa es el insecto de la primavera que simboliza el comienzo de nuevos proyectos, el orden, el progreso, la productividad, la participación social, la construcción, el desarrollo, la evolución.
También es la confianza muy necesaria para mantenerse erguido, consolidar la dignidad, y manifestar la voluntad de defender su posición moral y territorialidad a cualquier precio ante cualquier invasor”.

Hoy deseo traer al tocororocuabno.com las avispas, ese insecto volador, que pertenece al orden de los Hymenoptera y suborden Apocita y se le puede encontrar en muchas partes del mundo, entre ellos, nuestra amada tierra cubana. Se diferencia de las abejas en la delgada conexión entre el abdomen y el tórax.

Dentro del grupo de las avispas se encuentra todo insecto del orden de los Hymenoptera, que no pertenece a las hormigas o abejas. Muchas personas le temen por su dolorosa picadura y por ellos les dan un tratamiento inmerecido, olvidándose del rol positivo que cumple en la naturaleza.

Habitan en casi todo el mundo y eligen para sus nidos lugares soleados o que tengan mayor tiempo de exposición al sol, montículos cerca de las paredes, debajo de los aleros de casas, en árboles, en plantas, riberas de río y agujeros debajo tierra y raíces.

Se conocen más de 1000 especies de avispas sociales, entre ellas las que construyen colonias. El nido inicial lo construye la avispa reina y miles de miembros se aglutinan alrededor de ella, la mayoría son infértiles. Son las avispas obreras, la reina es la encargada de la procreación y se aparea con uno o varios machos, guardando los espermatozoides de estos en una bolsa interna en su cuerpo para ser usados en la próxima primavera, pues únicamente sobreviven para ese tiempo las reinas que se han apareado, mientras que el resto de la colonia termina su ciclo de vida.

Las reinas fertilizadas hibernan durante la temporada fría del año, para despertar en el verano y buscar un lugar apropiado para construir un nido, donde depositan los huevos, edificando de ese modo una nueva colonia.

Otros grupos de avispas son solitarias, viven, trabajan y se reproducen por cuenta propia, muchas de ellas no construyen nidos, en vez de ello elaboran celdas de barro en los árboles o paredes, otras viven en agujeros que ofrece la vegetación. Depositan un huevo por cada celda, donde dejan alimentos y las sellan. Después no tiene más interacción con la prole.

Los adultos se alimentan del néctar de las flores, por lo cual son polinizadores por excelencia y útiles a la naturaleza y el hombre. También brinda un gran servicio de control ecológico de especies de insectos dañinos, los cuales atrapa para completar su dieta, además consumen frutas caídas y carroña. Por todo esto se les considera omnívoras.

Las larvas se alimentan de larvas de otras especies insectívoros, que los adultos cazan, en esa etapa los mismos se convierten en verdaderos depredadores.

Su comportamiento y hábito alimentario le confiere una gran importancia en el medio ambiente, al establecer control biológico de plagas. Son necrófagas eliminando con ello restos orgánicos y contribuyendo al reciclaje de cadáveres y frutas. 

No se consideran en peligro de extinción, pero existen factores que las afectan directamente, como los plaguicidas, depredadores naturales y la acción del hombre, en muchas ocasiones por miedo infundado.

Independientemente de la especie, las avispas tienen características comunes, cabeza, tórax (mesomasa) y abdomen (metasoma), duro exoesqueleto. Su tamaño varía entre 3 a 4 cm de longitud. Ojos (ocelos) con capacidad de diferenciar la luminosidad y la oscuridad. En las especies nocturnas, estos son más desarrollados.

Tienen dos pares de alas y antenas en segmentos denominados escapo, pedicelo y flagelo. Existen hembras en varias especies carentes de alas. Poseen piezas dentales y 3 o 2 conjuntos de piernas. Las hembras tienen un aguijón (ovipositor) que se emplea para depositar los huevos. El color de la avispa puede ser negro o marrón oscuro. Las avispas más conocidas son negras y presentan franjas amarillas

Entre los miles de especies que se conocen, destacan las siguientes:

• Avispa de la madera

• Avispa de chaqueta amarilla

• Avispa amarilla

• Avispa cartonera

• Avispa lobo europea

• Avispa alfarera

• Avispón asiático gigante

• Avispón

• Avispa de Costa de Marfil

Nuestros heroicos mambises fueron muy ingeniosos a la hora de combatir al enemigo, talaron árboles, cavaron zanjas en los caminos para obstaculizar el movimiento de sus tropas y construían abrigos defensivo paralelo a los caminos.

La carencia de armamento le llevó a utilizar las avispas, como arma eficaz, aunque no mortal, desmoraliza y desorganiza al enemigo, que se veía obligado por instinto a romper sus filas y los hacía más vulnerables a los ataques y cargas al machete.

En el libro de “Seis cuentos cubanos” de Eudelio Pérez, encontramos una narración sobre uno de esos ataques. “Una nube amarilla de avispas brotó de los arbustos. Los gritos de los hombres atacados por los insectos se escuchaban por doquier. Intentando que no le picaran la cara, muchos dejaron caer sus armas al cubrirse el rostro con las manos, pero fue en vano. Finalmente, todos huyeron despavoridos, con las ropas desgarradas por las espinas y la sangre que les corría por las piernas y brazos...

Cuando las avispas volvieron a su madriguera por la tarde, los mambises felices y gozosos, recogieron las armas de fuego que los soldados habían abandonado; un total veinte, lo que representaba una gran ayuda para la importante batalla que se avecinaba”.

En honor y respeto a esos insectos en la lucha por la independencia de Cuba, un cuerpo armado de las FAR porta el nombre de Avispas Negras y en su emblema una representación de ellas.

Notas:

FAR - Fuerzas Armadas Revolucionarias

Mambises (mambí, en singular) - se refiere a los guerrilleros independentistas dominicanos, cubanos y filipinos.

Totémico, totémica - del tótem o relacionado con este objeto de la naturaleza.

Fuentes: 

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