Pensar la Doctrina de Guerra de Todo el Pueblo en el siglo XXI

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Por Henrik Hernandez

Introducción: la necesidad de actualizar sin romper

La Doctrina de la Guerra de Todo el Pueblo fue concebida para un tipo de guerra que ya no existe, pero sus fundamentos siguen siendo extraordinariamente válidos. Su fuerza reside en la descentralización, la participación masiva, la flexibilidad y la concepción del territorio como un sistema defensivo extendido. El desafío del siglo XXI no consiste en sustituir estos principios, sino en actualizarlos. La guerra moderna es una guerra de micro–unidades, sensores, saturación tecnológica ligera y enjambres autónomos. Pero, paradójicamente, es también una guerra donde las doctrinas territorializadas —como la cubana— se vuelven aún más pertinentes.

La transformación del combate: del batallón a la micro–unidad guiada por drones

El campo de batalla actual ya no está dominado por grandes maniobras mecanizadas. Las guerras recientes han demostrado que la táctica fundamental del siglo XXI es la operación microtáctica: grupos de dos a seis combatientes que avanzan con drones de reconocimiento sobrevolando sus movimientos, transmitiendo coordenadas y detectando amenazas escondidas. La infantería ya no avanza ciega: avanza acompañada por un “cerebro aéreo” que le permite explotar oportunidades y evitar emboscadas. Esta transformación encaja perfectamente con la tradición cubana de descentralización territorial.

Un territorio relecturado: las llanuras como plataformas tácticas

La geografía cubana, con sus grandes llanuras, fue tradicionalmente vista como un punto débil. Pero la guerra moderna ha cambiado el valor del terreno. Los drones convierten cualquier espacio abierto en un campo vigilado y potencialmente letal para el invasor. Un dron de observación sobre una llanura en Camagüey detecta movimientos a kilómetros; un FPV convierte cualquier columna mecanizada en un objetivo vulnerable. La llanura ya no es un vacío defensivo, sino una plataforma sensorial donde el defensor puede ver más lejos y golpear con precisión.

Las elevaciones dispersas y los pantanos: la defensa oculta del territorio

Aunque Cuba no posee cordilleras continuas, sus llanuras están llenas de elevaciones aisladas que pueden convertirse en nodos defensivos de primer orden. La Sierra de Najasa, la Sierra de Cubitas, la Loma de la Cunagua, las Lomas de Tamarindo y otras alturas dispersas en Camagüey–Ciego de Ávila permiten establecer puntos de vigilancia privilegiados. En el Occidente tenemos Las Escaleras de Jaruco, Alturas de Bejucal-Madruga-Coliseo, El Palenque y otras más. En la guerra moderna, una altura no necesita artillería pesada para ser decisiva. Una micro–unidad con drones puede convertir cada loma en una torre de control del territorio. Desde allí detecta aproximaciones, dirige ataques, monta emboscadas temporales y se repliega antes de ser fijada. Estas elevaciones, dispersas y numerosas, obligan al enemigo a dividir fuerzas, exponerse en llanuras abiertas y enfrentar múltiples focos de resistencia.

Algo similar ocurre con las ciénagas y humedales. La Ciénaga de Zapata, la Ciénaga de Lanier, los humedales del norte de Ciego de Ávila y las marismas del sur de Camagüey no son obstáculos, sino fortalezas naturales. Un ejército mecanizado queda atrapado en ellos; una microunidad ligera se mueve como pez en el agua. Los pantanos permiten esconder bases operacionales, lanzar drones desde vegetación densa, desplazar combatientes sin ser detectados, dificultar sensores térmicos y establecer puestos de mando móviles. Son, en esencia, la retaguardia moderna de la resistencia.

La ciudad como fortaleza tridimensional

La ciudad se ha convertido en el verdadero corazón de la defensa. La Habana, Santiago, Camagüey o Santa Clara no son solo espacios urbanos: son laberintos verticales. Azoteas, balcones, sótanos y pasillos constituyen una arquitectura de múltiples niveles donde drones interiores y exteriores permiten vigilar, atacar y maniobrar sin contacto directo. La ciudad del siglo XXI no se ocupa: se sufre. Una ciudad pequeña puede resistir días; una grande, meses. En una ocupación prolongada, cada esquina se convierte en una amenaza y cada edificio en un bastión.

Drones: multiplicadores, no sustitutos

La tecnología ligera no desplaza a los medios tradicionales: los eleva. Un dron de observación vuelve quirúrgica una pieza de artillería; un FPV vuelve vulnerable a un blindado; un dron interior despeja habitaciones sin exponer vidas. La clave no es la sofisticación industrial, sino la creatividad en la adaptación. Para Cuba, la modernización doctrinal significa convertir lo civil en militarizable y lo barato en decisivo.

Tácticas esenciales del siglo XXI

El combate actual se organiza como una red de acciones simultáneas: micro–unidades que avanzan bajo vigilancia aérea; ataques puntuales de saturación; emboscadas guiadas por sensores; infiltraciones ligeras con retirada inmediata; vigilancia continua desde drones; y una clandestinidad tecnificada que opera en territorio ocupado. El frente desaparece y es reemplazado por un mosaico de nodos activos.

Aportes cubanos: interceptores improvisados y enjambres marítimos

Cuba puede proponer innovaciones propias. La primera es el uso de drones como interceptores improvisados contra helicópteros y aeronaves de descenso. Un FPV impactando palas, sensores o tren de aterrizaje puede obligar a abandonar una aproximación. La segunda es el uso de enjambres contra lanchas de desembarco, extremadamente vulnerables en corredores estrechos. La tercera —el concepto más avanzado— es el Enjambre Tridimensional: drones aéreos que saturan sensores, drones de superficie que atacan cascos y drones submarinos que penetran silenciosamente por debajo. Una defensa costera ligera, barata y territorializada puede dificultar incluso a una fuerza naval superior.

La clandestinidad tecnificada: la tercera fase inevitable

Si el enemigo captura ciudades, carreteras o aeropuertos, la guerra no termina. Comienza su fase definitoria: la clandestinidad. Los defensores se disuelven entre la población, organizan células, ocultan equipos, vigilan movimientos enemigos y se repliegan hacia montañas, elevaciones dispersas y humedales desde donde irradian operaciones continuas. La Sierra Maestra, Cordillera del Rosario, La Sierra de Cristal, y el Escambray conservan su valor histórico, pero ahora se suman Najasa, Cubitas, la Cunagua, Tamarindo y las ciénagas como centros de resistencia moderna.

Resiliencia ante guerra electrónica y contramedidas del enemigo

Una doctrina basada en drones y nodos ligeros debe asumir que el enemigo intentará interferirla. La guerra electrónica, el jamming, el spoofing, los ciberataques y los sistemas antidrones serán inevitables. La clave es que la doctrina no dependa de la comunicación continua. Los drones deben completar misiones aun sin señal, mediante preprogramación, navegación inercial o visión artificial. Las estaciones de control deben operar aisladas, sin redes globales, con firmware modificado y software nacional. Los enjambres deben saturar defensas. La descentralización debe permitir continuidad aun sin mando central. El engaño —señuelos térmicos, transmisiones falsas, drones sacrificables— debe confundir sensores enemigos. En esta capa doctrinal, la tecnología deja de ser un punto débil y se convierte en resiliencia sistémica.

Disuasión: el objetivo final

El fin de la defensa no es ganar batallas, sino impedir que el enemigo intente librarlas. La actualización de la Guerra de Todo el Pueblo busca que ninguna invasión sea rápida, que ninguna ocupación sea estable y que ningún territorio pueda ser controlado sin un costo político, humano y económico insoportable. La disuasión surge cuando el adversario comprende que el conflicto sería interminable. Una doctrina que garantice ese mensaje es una doctrina victoriosa.

Conclusión

Pensar la Guerra de Todo el Pueblo en el siglo XXI significa no reemplazar la esencia histórica, sino expandirla. La combinación de participación popular, descentralización territorial, creatividad técnica, elevaciones dispersas convertidas en nodos, humedales como bases operacionales, defensa urbana tridimensional, enjambres aéreos y subacuáticos, micro–unidades móviles, clandestinidad tecnificada y resiliencia electrónica convierte a Cuba en un sistema defensivo vivo.

Una nación organizada bajo estos principios no necesita grandes arsenales para ser impenetrable: su verdadera fuerza radica en la claridad de su estrategia.

Glosario de términos clave:

Dron / UAV: plataforma aérea no tripulada para observación o ataque.

FPV: dron guiado en primera persona mediante cámara.

Micro–unidad: célula táctica mínima de alta movilidad.

Guerra electrónica: técnicas para interferir señales o sensores.

Spoofing: Suplantación de señales, especialmente GPS.

Enjambre tridimensional: Combinación coordinada de drones aéreos, de superficie y submarinos.

Negación marítima: Estrategia para impedir o dificultar desembarcos enemigos.
Clandestinidad tecnificada: Resistencia en territorio ocupado apoyada en tecnología ligera.

Navegación inercial: Sistema que permite operar sin GPS.

Fuentes consultadas:

BBC. El crucial rol de los drones en la guerra de Ucrania (y quiénes los suministran). Consulta 2024-08-24. https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-62279288

Díez Cámara, Octavio. UCGV: vehículos no tripulados armados, el futuro del combate terrestre. Consulta 2024-08-24. https://www.defensa.com/enfoque/ucgv-vehiculos-no-tripulados-armados-futuro-combate-terrestre

El Independiente. Alonso, Ana. Boom de drones en la guerra contra Ucrania: "Las fábricas están a pleno rendimiento". https://www.elindependiente.com/internacional/2023/09/10/boom-de-drones-en-la-guerra-contra-ucrania-las-fabricas-estan-a-pleno-rendimiento/

Hernandez, H. (2024, agosto 24). Lecciones para Cuba de la guerra en Ucrania. Tocororo Cubano. https://tocororocubano.com/lecciones-para-cuba-de-la-guerra-en-ucrania/

Hernandez, H. (2025, enero 26). La Doctrina de Guerra de Todo el Pueblo: una defensa histórica y estratégica de la soberanía cubana. Tocororo Cubano. https://tocororocubano.com/la-doctrina-de-guerra-de-todo-el-pueblo-una-defensa-historica-y-estrategica-de-la-soberania-cubana/

Meier, L., Ahmed, S., & Shin, Y. (2021). Drone detection using multi-sensor fusion. arXiv. https://arxiv.org/abs/2111.01888

MSS Defence. (2024). La evolución del campo de batalla: los últimos drones FPV en la guerra moderna. https://mssdefence.com/es/blog/la-evolucion-del-campo-de-batalla-los-ultimos-drones-fpv-en-la-guerra-moderna/

SwissInfo. (2024). Cohetes, drones y defensa antiaérea: el arsenal de Hezbolá en Líbano. https://www.swissinfo.ch/spa/cohetes%2C-drones-y-defensa-antia%C3%A9rea%3A-el-arsenal-de-hezbol%C3%A1-en-l%C3%ADbano/81459265

United24 Media. (2024). Cómo los drones redefinen la guerra moderna. https://united24media.com/es/war-in-ukraine/todo-lo-que-se-necesita-saber-sobre-como-los-drones-redefinen-la-guerra-moderna-8721/

Ullah, S., Fayaz, M., & Kim, K. (2020). Security, privacy, and safety challenges for UAVs. arXiv. https://arxiv.org/abs/2008.12461

WIRED. Meaker, Morgan. La guerra en Ucrania lleva las armas autónomas al frente de batalla. Consulta 2024-08-24. https://es.wired.com/articulos/uso-de-drones-como-armas-autonomas-en-guerra-de-ucrania

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